como un pueblo que libro luchas y otorgó triunfos con celebres héroes al servicio, la unión y trabajo. A su vez, Marinilla considerada en un escenario religioso, como Dios su principal guía y fortaleza, siendo muy católica y con camino de espiritualidad donde se hace evidente por hombres ilustres que han contribuido a hacer de ella lo que hoy a sus 350 años representa.
“Recordar es vivir”, así fue como se dio inicio a la gran celebración, un cumpleaños esperado por todos los marinillos, su pueblo la Esparta colombiana con 350 años de poblamiento, de historia y vida. Fue centro de encuentro, de fiesta con su comunidad, y con Dios, la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción en el Municipio de Marinilla, que sirvió de casa para el regocijo y reencuentro con hombres ilustres que a través del tiempo, de su tiempo, ayudaron y estuvieron al servicio de la comunidad.
Con aproximadamente 800 personas, 50 sacerdotes y 2 obispos oriundos de Marinilla, se congrego en el altar sagrado la memoria de su pueblo como enseñanza y testimonio de fe ante los ojos de Dios y la comunidad. El Obispo de la Diócesis de Sonsón-Rionegro Monseñor Fidel León Cadavid Marín, abrió el telón a la celebración de los 350 años de poblamiento, con una simple pero gratificante palabra “gracias” y continuo “Lo que somos hoy se debe a lo que ha sido, ayudar a construir historia, cultura e identidad. Nacidos como comunidad políticamente organizada, donde se tiene origen, ancestros y cultura”
Marinilla como un cruce de caminos se da en un asentamiento poblacional, y su identidad reconocida por el emprendimiento de su gente hace de estos 350 años un proceso de poblamiento y ahora a nuestra fecha un acontecimiento, Monseñor Fidel León Cadavid Marín dice “No olvidar sus raíces, los que olvidan se desintegran. Recordar las raíces es no vivir sin ellas, esto es madurez humana y social” de estas palabras partió a dar su reflexión en una sociedad donde el cambio se hace más evidente con el paso del tiempo, y como comunidad se parte a observar las condiciones y los comportamiento de cada individuo. En la reconstrucción de la memoria, y en la historia viva se acercó desde sus palabras y la del evangelio a lo que significaba esta celebración identificando a Dios y el amor en la comunidad en todo este tiempo conmemorado.